Reflexión sobre el uso de los parques infantiles, los riesgos para los pequeños y la oportunidad para el fomento de la cultura de la salud, la cultura preventiva.

Reflexión sobre el uso de los parques infantiles, los riesgos para los pequeños y la oportunidad para el fomento de la cultura de la salud, la cultura preventiva.
Reflexión sobre el impacto que reciben los niños sobre una cultura preventiva negativa desde la industria del entretenimiento
Parker et al. (2006)1 presentan la consecución de una cultura preventiva como un camino progresivo con cinco niveles de avance: patológico, reactivo, formalista, proactivo y generativo.
El concepto de “cultura de seguridad” nace en los años 80 vinculado fundamentalmente a los accidentes mayores y en concreto al accidente nuclear de Chrenobyl, pasando a ser denominado “cultura preventiva” cuando con el tiempo se amplía al conjunto de riesgos y adopta una dimensión global.
El planteamiento surge al comprobar la falibilidad de los sistemas de gestión de la seguridad en empresas de alto riesgo, después de grandes inversiones realizadas en su definición, implantación y desarrollo, estos sistemas no son capaces de garantizar la seguridad y se producen accidentes catastróficos. El concepto de “cultura de seguridad” nace para salvar este “gap”, entendiéndose como la capacidad global de una organización para garantizar el funcionamiento eficaz de sus sistemas de gestión de seguridad y salud, la ausencia de esta capacidad aumenta la posibilidad de fallos del sistema.